La piel de los gluteos puede lucir suave y aterciopelada con un tratamiento casero de pocos minutos
Si existe una zona del cuerpo que jamás recibe cuidados es precisamente la piel de los glúteos.
Solo se recuerda su existencia cuando llega el verano y el espejo muestra una serie de problemas.
Entre ellos se destacan celulitis, flacidez, granitos, marcas, manchas, resequedad o piel áspera, todo eso puede evitarse aprovechando la ducha como spa.
COMO TENER LA PIEL DE LOS GLUTEOS PERFECTA
* Una o dos veces por semana se puede realizar una exfoliación de los gluteos para suavizar la piel, eliminar asperezas y celulas muertas.
Se realiza una mezcla utilizando medio pote de yogur natural y dos o tres cucharadas de sal fina, se vierte sobre una esponja de baño y se masajean los gluteos con suaves movimientos circulares.
La exfoliación de los gluteos se efectúa en un tiempo aproximado de uno o dos minutos.
No friccionar la piel con fuerza para evitar irritaciones.
* Usar siempre para la ducha una esponja áspera (las esponjas vegetales son las mejores) y un jabón cremoso.
De esa forma se realizan masajes diarios de la piel de los gluteos para reactivar la circulación sanguínea.
Es una buena manera de prevenir flacidez y celulitis, además de mantener la piel suave y tersa.
* Luego del baño es cuando las cremas son mejor aprovechadas por la piel, debido a que los poros están abiertos y es en ese momento cuando se debe aplicar una crema hidratante.
* Aplicar cremas reafirmantes, este tipo de cremas ayudan a prevenir la flacidez y a mantener la piel firme.
Con estos cuidados diarios la piel de los gluteos estará todo el año fabulosa y no habrá sorpresas desagradables cuando realices la primer prueba del traje de baño, que por lo general se efectúa unos días antes de ir a la playa o a la pileta, cuando ya no alcanza el tiempo para solucionar los problemas que se acumularon durante el invierno.
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