Selfitis: el trastorno obsesivo de tomarse selfies compulsivamente

La Sociedad Americana de Psiquiatría ha definido como trastorno obsesivo-compulsivo el hábito compulsivo de tomarse selfies de forma constante. Esta condición ya tiene nombre: Selfitis.

¿Qué es la Selfitis?

La Selfitis se define como el deseo obsesivo y compulsivo de tomarse fotografías a uno mismo, ya sea para almacenarlas, admirarlas o compartirlas constantemente en redes sociales.

Aunque tomarse una selfie ocasional no representa un problema, la conducta comienza a ser preocupante cuando se convierte en una necesidad diaria y reiterativa, asociada a la validación externa y la autoestima.

¿Moda o trastorno emocional?

Las selfies surgieron como una tendencia tecnológica, pero en muchos casos se han convertido en una conducta compulsiva que, según expertos en salud mental, podría indicar la presencia de un desequilibrio emocional o psicológico.

La Sociedad Americana de Psiquiatría señala que este tipo de comportamiento puede ser una forma de compensar inseguridades, baja autoestima o vacíos afectivos no resueltos.

Tipos de Selfitis según su gravedad

Este trastorno ha sido clasificado en tres niveles o grados de intensidad:

• Selfitis Borderline: La persona se toma al menos tres selfies por día, pero no las comparte en redes sociales.
• Selfitis Aguda: Se toman al menos tres selfies por día y se publican todas en redes sociales.
• Selfitis Crónica: El hábito se vuelve incontrolable, con más de seis selfies diarias compartidas repetidamente en varias plataformas.

¿Cómo saber si estás desarrollando Selfitis?

Si notas que necesitas tomarte selfies de manera diaria, sientes ansiedad cuando no puedes hacerlo o te frustras si no recibes reacciones en redes sociales, puede que estés en una fase temprana del trastorno.

Algunos síntomas comunes:

• Sensación de vacío si no se comparte contenido personal.
• Obsesión por la imagen y la aprobación externa.
• Compararse continuamente con otras personas en redes.
• Negación o justificación del hábito como algo “normal”.

¿Qué hacer si crees que padeces Selfitis?

Reconocer el problema es el primer paso. Se recomienda:

• Limitar el uso del celular y redes sociales.
• Practicar actividades sin presencia digital.
• Trabajar la autoestima desde adentro, no desde la imagen.
• Buscar ayuda psicológica si el comportamiento interfiere con tu bienestar diario.

Selfitis no es solo un problema de vanidad, sino una señal de alerta emocional. Las redes sociales pueden potenciar nuestra necesidad de validación, pero depender de ellas para sentir valor personal puede ser un camino riesgoso para la salud mental.

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